El icónico vaso de la cerveza Kwak es conocido como “Koetsiersglas”. Fue diseñado por
Pauwel Kwak, un cervecero del siglo XVIII, que además de elaborar su propia cerveza, poseía una taberna a medio camino entre Gante y Mechelen llamada De Hoorn. Allí los conductores de coches de caballos solían parar para descansar. En aquella época, la ley Napoleónica dictaba que los cocheros no tenían permitido beber con sus pasajeros, por lo que no podían bajarse del carromato para beber. Pauwel Kwak solucionó este problema ofreciendo la cerveza en
un vaso especial que podía fijarse en el carro.
En 1982, Ivo Bosteels, inspirado por esta historia, creó la cerveza Kwak. La fábrica de cerveza Brouwerij Bosteels está situada en Buggenhout, Bélgica y produce también de la célebre
Tripel Karmeliet. Para elaborar la cerveza belga Kwak se utilizan solo ingredientes naturales de gran calidad: agua, cebada, lúpulo y levadura. En 2022, la gama Kwak se amplió y a la cerveza Kwak Amber se sumaron dos nuevas cervezas: Kwak Blonde y
Kwak Rouge.
Color ámbar con reflejos rojizos y espuma cremosa y persistente. Aromas suaves a malta, regaliz, caramelo y matices especiados. Al paladar es armoniosa suave y dulce sin llegar a ser empalagosa, con fondo de caramelo y un toque cítrico. Final cálido y amargo. Se recomienda tomarla a una temperatura aproximada de entre 10º C y 12º C en un vaso de tulipa. Graduación: 8 grados de alcohol.