Cerveza de abadía Leffe Blond
Leffe Blonde es una cerveza rubia de abadía belga de estilo Pale Ale, afrutada y ligeramente especiada, de color dorado y sabor suave. Se elabora siguiendo métodos tradicionales con malta de cebada y maíz, maltas aromáticas, agua de manantial, lúpulo y levadura mediante alta fermentación y es filtrada durante su proceso de elaboración.
La abadía Notre-Dame de Leffe
La historia de las
cervezas Leffe se remonta al 1240. Es en este año cuando las crónicas mencionan por primera vez la existencia de una cervecería en el monasterio de
Notre-Dame de Leffe, en Dinant, Bélgica. En aquella época las epidemias eran muy comunes por lo que los monjes de la abadía decidieron elaborar una bebida vigorizante y sana como alternativa al agua, que podía estar contaminada. La cerveza era la bebida ideal para esta tarea, ya que al hervir el agua durante la fase de fermentación mueren todos los gérmenes.
La abadía cerró sus puertas durante la Revolución Francesa y volvió a establecerse en el 1929. Es entonces cuanto el padre Nys, preocupado por el futuro de la abadía, decidió reunirse con el maestro cervecero Albert Lootvoet para
poner de nuevo en marcha la fábrica de cerveza, con la idea de volver a elaborar sus productos siguiendo las recetas originales de los monjes.
Leffe y Ab InBev
Hoy en día,
Leffe pertenece al gigante cervecero Ab InBev. InBev se formó en 2004, cuando la compañía Belga Interbrew y la brasileña Compañía de Bebidas das Américas se unieron para formar una nueva fuerza mundial en la elaboración de cerveza. Cincuenta y dos mil millones de dólares cerraron el trato mas grande de la historia de la cerveza. La que dice ser la cervecera más grande del mundo, Interbrew, se formó en 1987 de la fusión de Brasseries Artois - entonces la segunda mas grande de Bélgica - y Brasseries Piedboeuf - productora de la cerveza
Jupiler-.
Notas de cata
Color dorado y limpio, con reflejos en tonos ámbar y espuma clara bastante compacta y consistente. Aromas a levadura, frutas como el plátano, miel y especias. Al paladar es suave, muy carbonatada, de sabor bastante dulce, con notas frutales. Final alcohólico. Se recomienda servirla a una temperatura de 8-10 º C en un vaso de cáliz, junto a aperitivos tales como queso o embutidos. Graduación: 6,6% alcohol.